Outliers - Arturo Casas
Hola soy Arturo Casas y soy Co-fundador de Jóvenes Unidos para la Tecnología A.C. y fui social listening intern en el Digital Lab del Tec.
Para mí fue como entrar a Disney World, y me subí a todo lo que podía. Estuve en grupos estudiantiles, extracurriculares y prácticas en On Campus Jobs.
En el Tec de Monterrey estudié la carrera de Administración de Estrategia de Negocios donde encontré mi vocación, pero no siempre fue así, empecé en ingeniería física y terminé cambiándome a LAE. En esta transición tuve mi peor época y quería dar de baja una materia, fue ahí donde encontré a mi mentora y mi pasión por la investigación. Participé en el Congreso de Investigación de Ciencias Administrativas de la UNAM y en el Congreso de Investigación y Desarrollo del Tec. Trabajé dos años en Social Listening, utilizando una herramienta con la que se monitorea lo que se dice en los medios digitales del Tec.
Uno de mis hobbies es involucrar la creatividad en mi vida estudiantil, considero que hacer cosas de áreas diferentes sirve para crear cosas nuevas como en robótica. Así es como nace mi participación como mentor junior de un proyecto de robótica en Guadalupe, Monterrey. Con el equipo nos fuimos al mundial.
Siendo el novato estrella, ganamos el Premio de Inspiración, el Premio de Innovación y el Premio de Trayectoria Social. Tuvimos conexiones con el INJUVE de Guadalupe y creamos junto a un amigo y un profesor, la asociación civil “Jóvenes Unidos para la Tecnología” con una red de voluntarios jóvenes con visión de conectar la ciencia, la tecnología y la robótica con la parte de servicio e impacto social. No ha sido fácil, tenemos retos en la organización, coordinación del manejo del talento humano y financiamiento para poder hacer sostenible económicamente el proyecto.
Una experiencia que me marcó fue una vez que iba con mi papá a otro país por una cita médica, nos detuvieron en la frontera porque pensaban que íbamos como indocumentados. Solo nos hicieron una entrevista, pero al salir nos dimos cuenta de que no teníamos transporte y recuerdo muy bien que mi papá me dijo; “Hijo, no importa cómo, no importa si es caminando, nosotros vamos a llegar” y es lo que pienso con todos mis proyectos pues
las dificultades solo me motivan a seguir para ayudar al progreso de la sociedad.
Hoy busco transformar la realidad y resolver problemas. Soy un Outlier porque mi historia comienza en el Tec y termina cambiando el mundo.
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